La DEPRESIÓN es un trastorno del estado de ánimo constituido por un conjunto de síntomas de tipo afectivo, cognitivo y físico.
En niños y adolescentes la depresión se manifiesta de manera diferente a como lo hace en los adultos. Así, los menores que padecen este trastorno pueden presentar irritabilidad, agresividad, agitación, falta de concentración, desmotivación generalizada, disminución del rendimiento escolar, conductas disruptivas, trastornos del control de esfínteres, trastorno del sueño (insomnio o hipersomnia) y disminución o aumento del apetito.
Es importante conocer esta diferencia de la manifestación de la tristeza y el malestar anímico en niños y adultos, para poder ofrecer a los menores la ayuda necesaria. Cuando un menor presenta sintomatología depresiva, será esencial el apoyo de un profesional de la psicología para reestablecer el estado de ánimo óptimo del niño o adolescente.
Itziar Sainz-Pardo
Deja tu comentario